La culpa de todo, no podía ser de otra manera, la tuvo un libro. Un libro con el sugerente título de "El amor por los libros: Un acercamiento a la bibliofília". El autor, un individuo que debería ser tratado como un peligro social, es un tal Francisco Mendoza Díaz-Maroto. La gente debería ser mas consciente de las consecuencias que la lectura de sus obras tiene para un ciudadano indefenso. Ciudadano que, lo sé por experiencia, era moderadamente feliz rodeado de libros de los que ignoraba el nº de edición, el tamaño de los márgenes o el tipo de encuadernación.
A partir de la lectura del venenoso libro, la vida de dicho ciudadano cambió totalmente. Su tranquilidad se fué a tomar por el mismo saco. Sus menguados ahorros volaron a las cuentas corrientes de librerías de viejo, casas de subastas y otros antros de perdición. Nombres que hasta ese momento le importaban un bledo: Aldo, Etienne, Ibarra..., ahora ocupaban su pensamiento las 24 horas del día. Pergamino, tafilete, pasta valenciana. Grabados xilográficos. Colación. Marca de agua. Catálogo Colectivo. Palau. Ni siquiera cuando se acostaba conseguía descansar. Pesadillas en las que algún encuadernador sin escrúpulos guillotinaba las hojas de un libro sin ningún tipo de piedad con los márgenes, se sucedían con otras en las que veía como un librero vendía a otra persona un ejemplar en perfecto estado de la Legenda Aúrea de Jacques de la Voragine en edición de Gering, Grantz y Friburger, París, 1475, por un precio irrisorio. Por un ejemplar del Salustio de Ibarra hubiese vendido el alma de todos los miembros de su comunidad de vecinos.
Y pasaron los años. Nuestro héroe no solo no se ha curado, sino que ha visto como su estado ha ido empeorando con el tiempo. Terribles síntomas indican que el mal se ha extendido sin remedio. Su angustia a dado paso al placer.Los Aldo, Etienne...que antes le obsesionaban, ahora son cálidos amigos que le acompañan cada noche desde los estantes de la biblioteca. Pasar varias horas en el mágico taller de Angel , rodeado de prensas, hierros, pieles..estudiando la mejor encuadernación de un ejemplar de "De Iustitia et Iniustitia", le apasiona. En definitiva la bibliofília le ha atrapado tan totalmente que cualquier esperanza de curación está totalmente descartada. Es mas, empeorará con los años.
Aviso importante: No dejen un ejemplar del libro del tal Mendoza al alcance de los niños. El riesgo de contagio es muy alto. El que avisa no es traidor.
De iuftitia et iniustitia
Guilielmi lerouille
Alèconiefis Laufidi
ci in legibus licètia//
ti:Juftitie atqz m//
iustitie descri//
ptonii com
pendiu
David Joannes, Lyon 1531, 3ª Edición. 54 folios. 8º. Datos de edición sacados del colofón.
Portada a 2 tintas con orla y grabado xilográfico. Dedicatoria al Duque de Armagnac(que rico). Proemiun. Liber primus. Liber secundus. Liber tertius.Total 54 folios. Tabla de materias(15). Tipografía gótica a dos columnas. Capitulares. Apostillas marginales. Alguna anotación manuscrita de época. Grabados xilográficos(4) a media página mas otro a toda página.
Encuadernado en piel marrón en estilo mudéjar. Con hierros y dorados en las planas, cinco nervios y florones dorados en el lomo. Soberbia encuadernación realizada por Angel Camacho.
Detalles de la encuadernación y de las capitulares.
La primera edición parece ser de 1520 y la 2ª de 1529. De la 2ª edición el Catálogo Colectivo menciona 2 ejemplares, de la de 1531 no cita ninguno. La paginación no coincide, los del C.C. tienen XXXIII folios. Uno de los dos está en la B.N.E. Tendré que vencer mi pereza habitual y acercarme para compararlo con este.
La orla de la portada la he visto en otros libros, de otros editores. Supongo que el molde tipográfico era objeto de venta entre unos y otros. Como se ve los datos del editor no figuran en la portada, si en el colofón, lo que era bastante habitual en la época. La tipografía, gótica, es francamente bonita.
Hay un grabado en el libro uno.
Otro en el libro segundo.
Guillaume La Rouille , jurista francés fallecido en 1550, fue un personaje bastante extraordinario. Publicó varios libros de leyes. Además de jurista fue historiador, librero, editor, poeta y hasta vendedor ambulante.
El estado del libro es muy bueno, a excepción de la mancha de humedad que se ve en las fotografías.
Buenas noches.
Una maravilla apta para el más alto bibliófilo adicto. Todo el conjunto (encuadernación, tipografía, xilografias, texto...) es muy equilibrado.
ResponderEliminarTemo que la incurable enfermedad, entra a su fase aguda con la cercanía de semejantes ejemplares.
ResponderEliminarEs un libro precioso en todos los aspectos.
La encuadernación le va muy bien, el grabado del libro II, ¡sorprendente!.
Gracias por compartirlo.
Bellíiiiisimo libro.
ResponderEliminarCoincido en las consecuencias de leer a Mendoza Díaz-Maroto y también en lo sabroso del Armagnac.
Felices Fiestas
Galderich, Fabricio y Bibliotranstornado: Gracias por vuestros comentarios. es muy gratificante. Por si no tenemos contacto antes de Nochebuena
ResponderEliminar¡¡¡FELICES FIESTAS!!! para todos vosotros (Bon Nadal, Galderich). Un abrazo
Pues sí que estás pillado, sí. Muy hermoso libro. Me han gustado particularmente los grabados, aunque sea poco original decirlo: en estos tiempos es difícil encontrar libros tan bellos, pero al menos afortunadamente ha cambiado el concepto del castigo. Lo de vender las almas de los miembros de la comunidad de vecinos por el Salustio, pues depende de los vecinos. Habrá quien piense que a ese precio es una ganga. Un saludo, y felices fiestas.
ResponderEliminarGracias. Lo de los vecinos lo intenté y solo me daban a cambio las Obras Completas de Marcial Lafuente Estefanía en rústica, 5ª edición.
ResponderEliminarFelices Fiestas!
En efecto Mendoza es un biblioterrorista y su obra, sabiamente situada en todas las librerías de España, caza incautos con su gas antrax, mostaza o vaya usted a saber!!
ResponderEliminarPaso link de esta página al Sr. Mendoza por si quiere dejar su opinión o descargos sobre las acusaciones formuladas contra su persona.
¡¡Imagino que el taller de Angel es Camacho, sin duda uno de los grandes, y pocos que quedan, encuadernadores españoles contemporáneos. la vestidura realizada es perfecta y en plena armonía con le época del libro. ¡Y del libro qué decir!: es una hermosura por su tipografía y sus grabados.
¡¡Saludos bibliófilos y felices fiestas!!
Muchísimas gracias. El taller, en efecto, es de Camacho, gran encuadernador y mejor persona.
ResponderEliminar¡¡Felices Fiestas!!
Un abrazo.
Acabo de descubrir tu blog. Enhorabuena por decidirte a compartir joyas bibliográficas como la que nos has mostrado. Y bienvenido al grupo de los cuadernos de bibliofilia y libro antiguo. ¡Feliz Navidad!
ResponderEliminarHola Carlos! Bienvenido al blog. Gracias por tu mensaje. ¡Felices Fiestas!
ResponderEliminarEnhorabuena acabo de descubrir tu blog. Muy hermoso libro.
ResponderEliminarBienvenido al grupo de los apasionados de bibliofilia y libro antiguo.
¡Feliz Navidad!
Muchas gracias por tu visita. Sigo tu blog, que me parece muy interesante, hace tiempo y es una alegria que visites el mío.
ResponderEliminarUn abrazo y Felices Fiestas.
A mi me pasó algo parecido con el libro de Mendoza.
ResponderEliminarEl libro que nos muestras es precioso, de lejos, de cerca debe ser la ...
D.Mallén si no te importa recojo la palabra "bilioterrorista" para mi Bibliodiccionario.
Hola Biblioaprenant ¡Benvingut!, personalmente considero a ese tal Mendoza como un peligro para personas inocentes. Biblioterrorista es una definición perfecta.
ResponderEliminar¡Bon Nadal!
Llego muy tarde a esto (ya ni siquiera está a la venta el libro que comentas), pero me acabo de comprar el titulado EL MERCADO DE LIBRO ANTIGUO EN ESPAÑA, del mismo autor, y estoy deseando que llegue a casa para sumergirme en él. Yo padezco la misma enfermedad, y llevo ya un tiempo recorriendo mercadillos y librerías de viejo. Espero aprender algo :-)
ResponderEliminarUn saludo.